"El cubilete de dados nos entretiene
y es un regocijo para el grande
allí donde los guerreros se sientan
allí juntos en la sala de banquetes."
y es un regocijo para el grande
allí donde los guerreros se sientan
allí juntos en la sala de banquetes."
Secretos, iniciaciones, juegos, apuestas, örlog...
En el sendero de la vida nos encontramos varias opciones para vivirlo: de la forma caótica o de la ordenada, de la divertida o de la rutinaria, de la cotidiana o de la excéntrica, de la sumisa o de la dominante, de ganadores o de perdedores...
Decisiones, decisiones... ahhh, ¿qué resulta más atractivo: jugar o dejarlo pasar?, ¿apostar poco o poner todas las fichas en un mismo movimiento?, todo depende de la forma en la que deseemos gastar nuestras emociones... pero nadie negará que la adrenalina que se dispara al hacer una apuesta fuerte y peligrosa es un placer intenso... además: siempre hay que correr riesgos.
Para los guerreros nórdicos, la apuesta debía ser a ganar, porque quien pierde muchas veces, pierde también la secuencia de victoria.
Una interesante reflexión que encontré acerca de la runa Perthro es: "hay que apostarle a la decisión correcta". Porque de esa forma, un halo de sabiduría nos cubrirá al encontrarnos siempre del lado ganador, porque supimos elegir lo mejor para nosotros, lo adecuado para la situación.
También al tirar los dados nos hallamos con el örlog, algo más complejo que el destino que mencionaban los greco-romanos, porque se considera que hay un boceto de lo que hemos de vivir, pero siendo un guerrero vikingo, hijo de Odin, se es consciente de que las elecciones son nuestras, de que somos responsables de lo que decidimos.
Karma... así le llaman en la tradición budista... y no estamos lejos de eso, porque con Perthro hay que meditar en que nuestras acciones traen consecuencias, así que si decidimos apostar, que sea a ganar.
En cuanto a los secretos... mejor que permanezcan como tales, ya que no todos los oídos están preparados para escucharlos.
Yo estoy aprendiendo a jugarme el pellejo y mi sanidad por lo que me apasiona en el momento: sea una persona, un ideal o algo más. Lo que me falta ir puliendo es saber que lo que estoy eligiendo no es simplemente un placer visceral sino lo verdaderamente indicado para mí.
¡Tiremos esos dados una vez más!
Wassail !!!!